giovedì 22 gennaio 2015

Tanja Tammimies: una oyente finlandesa en el Istituto Europeo

de Ilaria Gelichi
traducción por Ana Peinado

Tanja cuéntanos algo sobre ti. De dónde vienes, a qué te dedicas,…

Soy Tanja Tammimies y soy de Finlandia. Soy profera de finlandés en Oulun Aikuiskoulutuskeskus, el Adult Education Centre in Oulu, Finlandia. Vine a Florencia a través del programa Leonardo Da Vinci para visitar el Istituto Europeo, conocer el método de enseñanza de la lengua, cultura y música y saber cómo trabaja el colegio.

¿Qué tipo de estudiantes tienes en tu centro en Finlandia?

Tengo muchos tipos de estudiantes, de todas partes del mundo. Muchos maridos y mujeres de gente finlandesa, refugiados, gente que terminó su trabajo en Oulu y decidió quedarse.

En tu opinion, ¿cuáles son los problemas más comunes en tu trabajo?

Al principio es difícil porque el filandés es muy diferente a la mayoría de idiomas. Como aquí, enseñamos solo en filandés porque es muy duro para los principiantes, pero después las cosas van mejorando. Por supuesto, a veces la motivación de estudiar una lengua extraña puede ser un problema. En Finlandia puedes sobrevivir con el inglés. Podrías vivir 20 años en Finlandia sin aprender finlandés. Por esta razón es muy difícil de encontrar una motivación para estudiar la lengua del país, yo creo incluso que en todos los países aprender la lengua es realmente clave para la sociedad. Así que si quieres vivir en un país deberías aprender su idioma.

¿Podrías contarnos más sobre el proyecto por el que vinistes?

El nombre del proyecto es Leonardo da Vinci Mobility Program. Está financiado y cordinado por CIMO, el Centre for International Mobility en Finlandia. El colegio que lo cordina está en Tampere, luego hay otros colegios participantes, como el mío. Conseguimos seis plazas para profesores para ir al extranjero para desarrollar relaciones interculturales entre nuestro colegio y otros colegios y desarrollar la experiencia profesional del profesor. Por ejemplo, si estuviera enseñando cocina en Finlandia podría ir a un colegio de cocina aquí para aprender cocina italiana. En mi caso, el objetivo es aprender algo nuevo sobre mi profesión-enseñar la lengua- en otro país.

Hablemos sobre Florencia, ¿habías estado alguna vez aquí? ¿Qués es lo que más te gusta de la ciudad, y de Italia en general?

Sí, había estado aquí muchas veces. Me gusta mucho Florencia, es por eso que viví antes aquí, así que para mí es familiar. De Italia en general me gusta la cultura de ser abierto: los italianos son más sociables que los finlandeses, estás más en contacto con la gente, horarios más flexibles,… Me gusta el estilo de vida, la forma en la que disfrutas de la comida y el tiempo para prepararla y comerla; en Finlandia no tenemos tanta cultura de comida. También, otra cualidad que los italianos tienen es lo orgullosos que están de su cultura y cómo saben mostrarla a los demás: en Finlandia no es lo mismo, somos un poco tímidos respecto a esto. También me encanta el arte y Florencia es única en “art content”: si estudias arte o arquitectura tienes que venir a Florencia, ¡no te puedes perder esta ciudad!

¿Cómo fue esta experiencia en el Istituto Europeo?

Ha sido genial. Asistiendo a las clases de italiano como oyente, podia sentir como se siente uno de mis estudiantes. En la clase la profesora habla solo italiano y por primera vez tuve la oportunidad de conocer a estudiantes extranjeros, con los que podia solo hablar en italiano porque no teníamos otros idiomas en común. Me gusta el colegio, las clases y los profesores son geniales: ha sido una experiencia interesante.

Por último, ¿tienes algún consejo que dar a alguien joven que quiera ser profesor? ¿Qué cualidades debe tener?

Ser abierto con la gente, estar preparado para enseñar, experimentar y dar todo de tí mismo. La cosa más importante es comunicarte con la gente, así que un buen profesor debe tener buenas habilidades para la comunicación,… ¡y mucha paciencia, también!